UNA TRAVESÍA SONORA DEL DESIERTO A LOS EXCESOS
La banda chilena Kamanchaka estrenó el 14 de marzo su nuevo EP, una mezcla abrasadora de stoner rock, psicodelia y crudeza lírica.
Desde las profundidades secas del desierto de Atacama, la banda regresa con un trabajo que no pide permiso: un viaje denso y psicotrópico donde riffs cargados de polvo se funden con atmósferas lisérgicas y letras sin tapujos sobre sexo, alcohol, calor y delirio.
Con este lanzamiento, Kamanchaka reafirma su sonido pesado y su identidad desértica. Cada tema es como una tormenta eléctrica sobre la arena: hipnótico, sucio y directo. No busca redimir ni moralizar, solo acompañar el descontrol y la contemplación en un territorio árido y real.
“No nos interesa disfrazar lo que somos. Este disco es para prender fuego, perderse y encontrar algo ahí, entre la niebla y la resaca”, comenta Jorge (voz y guitarra).
Grabado en sesiones intensas bajo el sol y la noche nortina, el EP se levanta como una declaración de principios: crudeza, volumen y libertad. Entre capas de distorsión, delays lisérgicos y letras viscerales, Kamanchaka mantiene vivo un rock que sigue siendo terreno de riesgo.
El EP ya está disponible en Spotify, Apple Music, YouTube y demás plataformas digitales. La banda además prepara un ritual en vivo para presentar este nuevo material como se debe: amplificadores al rojo vivo, cuerpos en trance y cerveza corriendo como agua en el desierto.