ESCASÍSIMO PÚBLICO PARA DESPEDIR LA GIRA EUROPEA DE LOS THRASHERS COLOMBIANOS ESPÍAS MALIGNOS
Está claro que sin la promoción adecuada, en fecha de fin de verano en Sevilla con altísima temperatura y mucha gente aún en la playa, tampoco esperaba un local abarrotado (por interesante y atractivo que fuera el cartel, que lo era) pero el aspecto de la sala era tristísimo -sobre todo por el buen nivel de los músicos que venían a hacer su trabajo- por el ridículo número de espectadores que no llegaba a la veintena. En un noble y honesto ejercicio de profesionalidad, amor por tocar metal en directo y una enorme “vergüenza torera”, las dos bandas decidieron ofrecer su show cuando perfectamente podían haber decidido su suspensión sin que nadie se sintiera ofendido.